La semilla de la palabra de Dios. - Pastor Jose R. Martinez

Sermon: La semilla de la palabra de Dios. -  Pastor Jose R. Martinez

Texto biblico: Mateo 13: 1-9, Mateo 13:18-23 La parabola del Sembrador.


Introduccion.
Cuando leo esta parabola, me hace recordar que un dia, cuando yo era un muchacho, mi padre me pidio que lo ayudara a preparar un terreno en la montana, para sembrar frijol. El terreno nunca habia sido cultivado, asi que estaba bien enmontado, y quedaba sobre una ladera. Cuando todo estaba listo, procedimos a sembrar, pero al no poder surcar el terreno, por causa de su topografia, mi padre decidio simplemente esparcir la semilla por todos lados. Unas semillas de frijol cayeron en partes planas, otras entre las ramas de los arboles, y otras mas cayeron sobre partes bien inclinadas. Cuando las matas de frijol crecieron, no todas alcanzaron a dar fruto, porque los animales del monte, se las comieron, ni pudimos recolectar todo el frijol por lo escarpado del terreno, asi que de lo sembrado, solo recogimos menos de la mitad de lo esperado. Mi padre me dijo: Esos son los riezgos de todo el que siembra; nada es seguro.

Sermon.
Mateo 13:1-9, Mateo 13:18-23
Dice la Palabra de Dios que la semilla fue esparcida por el campo, y ella cayo en cuatro tipos diferentes de condiciones del terreno.
1 - Una parte cayo sobre el camino.
2 - Otra parte cayo sobre las rocas.
3 - Otra parte cayo sobre los espinos.
4 - y la ultima parte cayo en buena tierra.
Luego el Senor nos dice tambien que la que la semilla que cayo sobre el camino, las aves se la comieron. Y que la que cayo sobre las piedras, las plantas que salieron se quemaron con el sol, porque no tenia mucha tierra, ni raiz. Y la que cayo sobre los espinos, las plantas salieron pero los espinos no las dejaron crecer y las ahogaron. La parte que cayo sobre buena tierra, dio fruto al cien, al sesenta y al treinta por uno. Despues Jesus explica la parabola a sus discipulos, y les dice que la semilla el la Palabra de Dios, y que el terreno es el mundo. La semilla que cayo sobre el camino es semejante al que oye la palabra del reino, y no la entiende, y viene el enemigo y se la roba del corazon. La semilla que cayo en pedregales es semejante al que oye la palabra con gozo, pero cuando viene la afliccion tropieza, porque la palabra no tiene raiz. La que fue sembrada entre espinos, es aquel que la recibe con gozo, la entiende y la guarda por un tiempo, pero los afanes del mundo y sus riquezas ahogan la palabra y se pierde. La que fue sembrada en buena tierra, es aquel que la oye, la entiende, y da fruto, y produce a ciento, sesenta y treinta por uno.

Lo que la parabola nos dice, es que la semilla toda es buena (la palabra de Dios), y que es esparcida por todo el mundo, El problema no es la semilla, sino la condicion del terreno donde cae. La semilla es sembrada para que crezca y de fruto, pero no todos estan dispuestos a prestarse para hacerla crecer. La semilla de la palabra de Dios, es sembrada en el corazon del hombre, pero no todos la aprecian y la atesoran. Las razones por las que las personas no guardan la palabra son muchas, pero lo cierto es que solamente un cuarto de toda la gente del mundo, es la que escucha y obra conforme a ella. No todos producen al ciento por uno, pero el que menos produce, es al treinta por uno, que ya es bastante.

Cuando la semilla, que es la palabra de Dios, es esparcida dentro del campo que es la iglesia, y sobre las mentes de los que alli la escuchan. Unos la recibiran con mucha atencion, pero otros no. Muchos seran como el terreno del camino, arido, duro y polvoriento, que cuando la semilla cae, su mente esta llena de pajaros (pensamiento critico), que se llevaran para que no produzca nada. El terreno en esa parte sera duro, como el corazon del que no cree. La segunda parte caera sobre personas que oiran y apreciaran la palabra, y por un tiempo la meditaran en su mente, pero por la presion del mundo y sus problemas aunque la semilla nazca, la quemara el calor de las piedras (enfermedades, deudas, trabajo, violencia, vicios, pecados, juego). La tercera parte caera sobre las mentes que la recibiran con gusto, y querran guardarla en sus corazon, pero que aunque germine la semilla, y nazca la planta, esta no prosperara por causa de las zarzas y los espinos, que estan representados por la riqueza, el poder, la fama, la vanidad, los deseos, el status social, y los compromisos. La ultima parte caera sobre las mentes y corazones que son como un terreno fertil, regado con lagrimas y abonado con el dolor y el sufrimiento, que apreciaran la semilla y la guardaran para que germine en un corazon contrito y humillado, para que de agradecimiento, y arrepentimiento.

El Senor dice: el que tiene oidos que oiga , y el que tenga ojos que vea, porque no todos los que tienen oidos oyen, ni todos los que tienen ojos ven,  Uno no puede ver la diferencia entre una persona que realmente oye la palabra y la guarda, y otro que no, porque no le podemos ver su corazon, pero Dio si lo hace. Hay personas en la iglesia que parecieran moverse en Espiritu, pero no es asi. Hay personas que se saben la Biblia, mejor que el pastor, pero no son fieles con nadie. El Senor nos dice: Por sus frutos los conocereis, y es asi. Hay que esperar y esperar a ver los frutos, y alli sabremos quienes son los que perseveran, quienes son sizana, o son trigo.

Conclusion.
Si tu estas en la iglesia y recibes palabra de Dios todas las semanas, toma notas, medita sobre ella, atesora los mensajes, y veras que tan importante es para tu vida, y la de tu familia. La palabra de Dios, es util para ensenar, redarguir, para corregir, para instruir en justicia. a fin de que todo hombre o mujer de Dios, sea perfecto, enteramente preparado para dar fruto bueno (2 Timoteo 3:16). La palabra de Dios te guarda, te alienta, te restaura, te sana, te ayuda a derrotar al enemigo. Cuando el diablo tento a Jesus en el desierto, Jesus le cito la Palabra. La palabra de Dios aumenta tu fe , pues la fe viene por el oir, y por el oir la palabra de Dios (Romanos 10:17) Cuanto mas atesores la palabra de Dios en tu corazon, mas grande sera el fruto que daras. Cuanto mas sepas de la palabra de Dios, mas seguro estaras de la verdad, porque cuando escuches algo que no esta escrito en esa palabra, tu sabras que es falso. Las personas que trabajan en los bancos, como cajeros, ellos aprenden a diferenciar los billetes buenos de los falsos, contando billetes buenos, pues cuando sus dedos tocan algo que no es verdadero lo sienten al momento. Tu puedes hacer la diferencia con esa semilla que recibes, permite que sea buena tierra para ella, y crezca y de fruto. Testifica de lo que la palabra de Dios ha hecho en tu vida, para que comiences a dar fruto. Si no conoces de Jesus, yo te invito a que lo dejes entrar en tu corazon, para que tu vida cambie, yo te lo garantizo. Recibir a Cristo no es cambiar de religion, es entrar en una relacion personal con El.