Cuando nos convertimos en lo que practicamos. - Pastor Jose R. Martinez

Sermón: Cuando nos convertimos en lo que practicamos. -Pastor Jose R. Martinez


Texto bíblico: Mateo 3:1-6 En esos días vino Juan el Bautista, predicando en el desierto de Judea y diciendo: Arrepentíos, porque el Reino de los cielos se ha acercado, porque él es el que se habla a través del profeta Isaías, quien dijo: una voz clamando en el desierto: preparen el camino para el Señor, hagan sus caminos rectos. Juan mismo tenía una prenda de pelo de camello con un cinturón de cuero alrededor de su cintura, y su comida era langosta y miel salvaje. Entonces el pueblo de Jerusalén, toda Judea, y todas las cercanías del Jordán acudían a él, y fueron bautizados por él en el río Jordán mientras confesaban sus pecados.

Introducción.

Existe la historia de un jinete forajido en el "viejo oeste", de los Estados Unidos de América, que se encontró con el cuerpo de un hombre tirado al costado de la carretera; era un predicador en su camino a una nueva misión, que había sido robado y asesinado. El fugitivo le quitó la ropa, la Biblia, y una identificación del muerto; vistió el cuerpo con su propia ropa, y se dirigió a la siguiente ciudad, fingiendo que era el nuevo predicador. Poco a poco empezó a leer y a estudiar la Biblia, y comenzó a predicar en la iglesia de la ciudad, tratando de esconder su pasado. La gente comenzó a ir a la iglesia, y desde el principio mostraron un gran respeto por él, que él realmente llego a creer que fue llamado para hacer eso. Dos años más tarde, un Marshall, que tenia mucho tiempo buscándolo, lo vio en su nuevo trabajo, y no podía creer lo que veían sus ojos. El hombre de la ley pudo haberlo arrestado en el acto, pero prefirió acercarse a la gente que iba a la iglesia y les pidió su opinión; todos ellos confirmarían que aquel hombre era un verdadero siervo de Dios. El Marshall habló con el hombre, y le dijo que tenía la autoridad para ponerlo en la cárcel durante mucho tiempo, pero debido a que estaba haciendo algo bueno, se consideraria el testimonio de la gente en su defensa. El Marshall regresó a su Estado, y le pidió al juez que perdonara el pasado del nuevo predicador, y finalmente el fugitivo se convirtio en un predicador de verdad. Así que a veces, nos podemos convertir en lo que practicamos; y no es lo que decimos, sino lo que hacemos, lo que hace la diferencia.


Sermón.
Texto bíblico: Mateo 3:1-6 En esos días vino Juan el Bautista, predicando en el desierto de Judea y diciendo: Arrepentíos, porque el Reino de los cielos se ha acercado, porque él es el que se habla a través del profeta Isaías, quien dijo: una voz clamando en el desierto: preparen el camino para el Señor, hagan sus caminos rectos. Juan mismo tenía una prenda de pelo de camello con un cinturón de cuero alrededor de su cintura, y su comida era langosta y miel salvaje. Entonces el pueblo de Jerusalén, toda Judea, y todas las cercanías del Jordán acudían a él, y fueron bautizados por él en el río Jordán mientras confesaban sus pecados.

Juan vino predicando la palabra de arrepentimiento y bautizando a la gente en el río Jordán. Estaba vestido con ropa de pelo de camello, y comía cosas del desierto. No era un hombre ordinario, era un profeta de Dios. Él sabía por qué estaba allí, y quién era. Él dijo, yo soy sólo un mensajero, para el que viene. Yo bautizo en el agua, pero él va a bautizar con el Espíritu Santo. Juan estaba practicando el bautismo de arrepentimiento, y era conocido por todos como Juan el Bautista. Bautista no era su apellido, Bautista era lo que el hacia, el bautizaba. Habian muchos juanes, pero este era el unico Juan que predicaba y bautizaba en el nombre de Dios. Filipenses 2:13 Porque es Dios quien pone el querer como el hacer en nosotros, para su Santo proposito. ¿En que te quieres convertir en el servicio al Señor?

1-Podemos convertirnos en cristianos.
Podemos llegar a ser cristianos, no sólo al arrepentirnos, confesar nuestros pecados, y recibir al Señor como nuestro Salvador, sino vivir una vida que honre a Dios y a Jesús. Cristiano no es sólo un nombre, sino una forma de vida; no eres cristiano porque tus padres son cristianos, no eres cristiano porque tu iglesia sigue a Cristo; eres cristiano, porque has decidido ser como Cristo. Si eres cristiano, no puedes avergonzarte del Evangelio. Si eres cristiano, no puedes negar que sólo a través de Jesús somo salvos.

2-Podemos convertirnos en siervos de Dios.
Santiago 1:22 Pero sean hacedores de la palabra y no de los oidores solamente, engañando a ustedes mismos, porque si alguien es un oidor de la palabra y no un hacedor, él es como un hombre que mira su propio rostro en un espejo; porque se mira a sí mismo, a los espectadores de distancia, y de inmediato olvida qué clase de hombre era. El verdadero siervo obedece, el verdadero siervo es fiel, el verdadero siervo no se queja, el verdadero siervo lo soporta todo. Pablo era un verdadero siervo de Dios. Tito 1:1 Pablo, siervo de Dios, y apóstol de Jesucristo. Romanos 1:1 Pablo, un esclavo de Jesucristo, llamado como un apóstol y despedido por la buena nueva de Dios.

3-Podemos convertirnos en discípulos del Señor.
Juan 14:12 Te aseguro: el que cree en mí también a las obras que yo hago. Y hará obras aún mayores que éstas, porque voy al padre. Los doce discípulos, a excepción de Judas, se convirtieron en los apóstoles del Señor. Lucas 9:23 si alguien quiere ser mi discípulo, él debe negarse a sí mismo-no mi voluntad, sino su voluntad-, tomar su cruz diariamente-hacer frutos de ofrenda y arrepentimiento, o lo que usted está dispuesto a sacrificar por él-,  y sígame-tenga comunión con él/permanezca en su presencia- Muchos dirán: Señor, Señor, en tu nombre hicimos esto o aquello, pero no haremos la voluntad de mi padre (Mateo 7:22). Si eres cristiano, pero no discípulo de Jesús, ¿quién eres entonces?

4-Podemos convertirnos en hijos e hijas de Dios.Juan 1:12 Pero a todos los que lo recibieron, les dio el derecho a ser hijos de Dios, a los que creen en su nombre. ~ Él nos da el derecho de ser, la palabra de Dios, no dice que ya somos hijos e hijas o Dios, pero podemos ser, podemos llegar a ser hijos de Dios, si nos damos cuenta del privilegio involucrado en esa afirmación, no debemos vivir tal vida, donde estamos en un fuera de la iglesia, o dentro y fuera del Evangelio. No debemos ser cálidos, pero calurosos o fríos, no deberíamos amar al mundo y amar al Señor al mismo tiempo, sino verdaderamente convertidos y obedientes hasta el punto de la muerte. El que es hijo sabe lo que hace el Padre, el que es hijo sabe que tiene herencia; el que es hijo sabe que no esta solo, el que es hijo hace lo que el Padre hace, el que es hijo sabe quien es su papa. Quien es tu Papa?

Conclusion.A los médicos se les enseña todo acerca de la medicina, a través de los libros y las enseñanzas, pero es la práctica con los enfermos, que los hace lo que ellos son. El vaquero Forajido de la historia, probablemente pensó que podía ocultar su identidad bajo la ropa del predicador, o hacer un nuevo nombre fuera del nombre del predicador, pero no podía por su cuenta; el Espíritu Santo hizo el resto, para que él amara lo que estaba haciendo, y se convirtiera en una nueva creación en la mano del Señor, y como la palabra de Dios dice: todas las cosas viejas se volvieron nuevas (2 Corintios 5:17). Y en cierto modo, todos nosotros, hemos sido forajidos ante el Señor, ya que no hay ni uno bueno, pero aún así, la palabra de Dios dice que él ha elegido las cosas insignificantes y despreciadas del mundo-las cosas vistas como nada-por lo que podría traer a nada las cosas que son vistas como algo, por lo que nadie puede jactarse en su presencia (1 Corintios 1:28). Cuando empezamos esta carrera, es posible que no entendamos muchas cosas, o no sentimos lo que otros sienten, pero poco a poco, el espíritu se impondra sobre la carne, hasta que somos bautizados por el Espíritu Santo, y entonces somos verdaderamente convertidos a Cristo. Si no conoces al Señor como tu salvador, ¿quieres recibirlo ahora?Que el Señor anada bendicion a esta palabra.